Goethe (34)
Nada hay más terrible que una ignorancia activa.
Nada hay más terrible que una ignorancia activa.
Las personas inteligentes tienen un derecho sobre las ignorantes: el derecho a instruirlas.
Todos somos muy ignorantes. Lo que ocurre es que no todos ignoramos las mismas cosas.
La ignorancia está menos lejos de la verdad que el prejuicio.
Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro.
La ignorancia es la noche de la mente: pero una noche sin luna y sin estrellas.
Nada perturba tanto la vida humana como la ignorancia del bien y el mal.
No saber lo que ha sucedido antes de nosotros es como ser incesantemente niños.
Sólo hay un bien: el conocimiento. Sólo hay un mal: la ignorancia.