Este fin de semana pasado hemos visto la película Celda 211, dirigida por Daniel Monzón y protagonizada por Luis Tosar, Alberto Ammann Antonio Resines y Carlos Bardem (entre otros).
Debo admitir que pese a no ser muy amigo del cine español, esta película me ha sorprendido muy gratamente: tanto la historia, como las actuaciones de todo el reparto como la tensión que se vive durante prácticamente toda la película.
Y la trama, sin querer descubrir demasiado, es de miedo (como Luis Tosar). Juan, un funcionario de prisiones, se acerca a la cárcel donde debe comenzar a trabajar al día siguiente y, por casualidades de la vida, se encuentra encerrado en los pabellones de presos en el momento en que se inicia un motín.
La primera «guerra» del funcionario es demostrar a los presos que él es uno de ellos, lo que le vale el mote de «Calzones» y luego intentar ayudar a la policia a saber que está pasando dentro para darles motivos con los que negociar.
Por si fuera poco, a estas complicaciones se une el hecho de que los presos toman como rehénes a otros tres reclusos y lo que va sucediendo en el exterior de la cárcel que van subiendo la tensión y cambiando los roles de algunos de los personajes.
La película es altamente recomendable, aunque en algunos momentos (muy pocos) las muestras de violencia pueden herir algunas sensibilidades.
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