Parece que poco a poco, y pese a la más que probable oposición de «algunos», se van a poner las cosas en su sitio.
Y es que una ley que, a parte de ruidosa, no es constitucional no tiene futuro, por suerte. Escribo, nada más y nada menos, sobre los proyectos legislativos del Gobierno para permitir el cierre de páginas web o la retirada de algunos de sus contenidos sin una sentencia judicial.
Leo en la Vanguardia, que el Consejo Fiscal, ha aprobado por unanimidad un informe crítico respecto a este proyecto legislativo. Dicho informe dictamina que hay un primer problema de concepto en los planes elaborados por el Ejecutivo, y es que trata de proteger la propiedad intelectual equiparándola a los derechos fundamentales de las personas.
Pero el informe objeta incluso la estructura de la Comisión de Propiedad Intelectual (CPI), que de hecho no está definida, o el hecho de que ésta pueda requerir datos para identificar a los responsables de las supuestas infracciones de los derechos de propiedad intelectual sin «autorización judicial previa».
Lo que viene a significar, a mi entender, que el anteproyecto propone que esta Comisión tenga los poderes de investigar, detener, juzgar y sentenciar a los supuestos infractores. Una suma de lo que para otros tipos de delitos hacen policía, fiscalía y judicatura…
La noticia viene rematada por una frase lapidatoria:
Lo que en ningún supuesto puede recabar la CPI, ni puede ser proporcionado por los prestadores de servicios de la sociedad de la información son informaciones referidas a comunicaciones privadas que puedan afectar al derecho fundamental al secreto de las comunicaciones». Estos datos «requieren ineludiblemente autorización judicial».
Acceso a la noticia: La Fiscalía pone objeciones al cierre de páginas web
Lo que da miedo, son las ideas que se les pasa por la cabeza. Yo ya estoy bastante escamado, porque nunca se sabe lo que pueden decidir en el futuro.
el tema es que si empiezan por esto.. uno nunca sabe lo que se viene..
Lastima que existan estos censuradores que estan acabando con la cultura del internet 🙁
Neutralidad en la red es la promesa de éste siglo.