Hace unas semanas decidimos alejarnos de la ciudad para pasar un par de días rodeados de naturaleza. Nos alojamos en la Casa Rural Cal Metge, en la comarca del Beguedà, a los pies del impresionante macizo del Pedraforca.

La casa es una enorme masía totalmente restaurada que regentan Teresa e Isidre, una pareja que hace unos años emprendieron esta aventura alejándose del ruido y el estrés de las grandes ciudades y nos trataron maravillosamente.

En esta casa rural sorprenden muy agradablemente unas cuantas cosas.

La primera, visible desde lejos, es la adaptación de la antigua torre de defensa de la masía convertida en un observatorio astronómico desde el que los propietarios te invitan a observar el firmamento: las estrellas por la noche, después de cenar, y el sol por la mañana, después del desayuno.

Esta característica la conocíamos antes de ir, un su web detallan estas actividades. Lo que no sabíamos es que la casa es también sede del centro de estudios budistas Men Pe Kangpa e Isidre invita a los huéspedes a participar con él de un rato de meditación un su capilla budista cada tarde sobre las 19h. Una especie de clase de yoga y relajación antes de la cena.

Además coincidió que el sábado 5 de marzo (cuando llegamos) estaban celebrando el día del Losar, el Año Nuevo Tibetano 2.138, que da comienzo al año de la Liebre de Metal y pudimos observar las actividades propias de dicho día.

Como veréis dentro de un poco en las fotos la casa cuenta además con una terraza con vistas hacia el Cadí, un jardín trasero enorme, con una estupa, un estanque, un jardín zen, una zona de meditación con un buda y otra zona de juegos para niños y en el interior hay también una biblioteca y una sala de ocio con sofás, juegos de mesa y televisión.

Destacar también la atención recibida y la amabilidad con que nos trataron desde el mismo momento en que llegamos a la casa hasta que nos fuimos, la calidad y cantidad  de desayunos y las cenas (con el primer plato habríamos tenido suficiente) y los «famosos» postres de la Teresa acompañados de algún licor que completaban el día perfectamente antes de subir al observatorio.

Por otra parte la cercanía al macizo del Pedraforca, hacen de esta casa un «campamento base» perfecto para excursiones y actividades en la naturaleza.

En definitiva, Cal Metge es un lugar al que sin duda volveremos y que recomendamos a todo aquel que busque un rincón de paz y tranquilidad rodeado de naturaleza.

Algunas fotografías de la casa y el Pedraforca:

Datos de interés:

  • URL: Masia Cal Metge
  • Vallcebre (Berguedà, Barcelona)
  • Teléfono:  93 822 60 34
  • email: informacio@masia-calmetge.com

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6 comentarios

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  2. Las casas rurales son muy ventajosas en muchos sentidos. Están rodeadas de naturaleza, de un ambiente bucólico. El descanso está prácticamente garantizado. Son generalmente más baratas que un hotel (por lo menos por cabeza). Se puede usar la cocina con lo que no hay que estar comiendo por fuera todo el tiempo. Se respira autenticidad… en fin, las casas rurales son una maravilla!

    Alex

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